domingo, 30 de diciembre de 2007

Otro año que termina

Otro año que termina sin tus besos recobrar
sin tus caricias, miradas, tus suspiros al gozar
sin tus celos, inquietudes ¿por qué no vuelve a llamar?
sin aquellos tus temores de volverte a enamorar.
Y con este que termina mas de veinte ya serán
los años que ha transcurrido, años que no volverán
los que tu y yo hemos perdido ¿quién sabe donde andarán?
y tan solo en nuestras mentes su recuerdo guardarán.
Pasamos inadvertidos entre la gente al gozar
de aquel nuestro amor tan puro, que nos unió por azar
y que entre mil y un suspiros, imposibles de olvidar
reviven en nuestras mentes, muchas noches al soñar.
Tu intentas que los recuerdos no despierten en tu mente
y así poder evitar, que tu cuerpo nuevamente
se entregue para gozar, cuando yo calladamente
con mis manos, con mis labios, en esa tu piel ardiente
deje la huella indeleble de que amar es solo dar
y consiga que un orgasmo de nuevo te haga volar
a un mundo de sensaciones que no has querido olvidar
y que guardas en ti dentro, para ya a solas soñar.
Otro año que termina y mas de veinte serán
los que han ido transcurriendo y que nunca volverán
por eso si tu me lees, tu que sabes mi verdad
perdóname si el recuerdo, te despierta la ansiedad
porque no estaré muy lejos y soy fácil de encontrar
mas respetare de nuevo, si en silencio me has de amar
y viviré del recuerdo de aquel verano sin par
en que tu y yo si sabemos, nadie nos puede quitar
como te quise te quiero, como calle, he de callar
recibe con este un beso que otro año va a empezar
y seguiremos caminos que tal vez es el azar
se encuentran y se separan como queriendo evitar
que el hacer de los dos uno, en otras noches sin par
dejen sueltas las pasiones, que juntos sabemos dar
al amor sin concesiones de nuestra forma de amar
y tras veinte y tantos años, sin tu cuerpo acariciar
aun vibro cuando te veo, aunque distante pasar
a mi lado y un saludo, educada sueles dar
e intercambiamos dos besos, disimulando al mirar
y al separarnos te sigo, con la mirada al marchar,
y volverán los recuerdos en mi mente a recobrar
el aroma de tu cuerpo en mis brazos al gozar
y el sabor de aquellos besos, que nunca volví a encontrar
aquellas tus manos suaves, que lograban excitar
mis masculinos sentidos, hasta la dicha alcanzar
y tu cuerpo estremecido, cuando de nuevo al gozar
lanza al aire sus suspiros, entremezcla con gemidos
que despiertan tus sentidos, de nuevo al volver a amar.
Tal vez solo un sueño ha sido y otro año pasará

o tal vez si que haya ocurrido y lo que sea, será

sábado, 29 de diciembre de 2007

Contigo he vuelto a soñar

Contigo he vuelto a soñar
y en mi sueño, lentamente
volvías a acariciar
con tus labios sabiamente
sin apenas descansar,
zonas de mi cuerpo ardiente
que al tus caricias notar,
se estremecía impotente
sin fuerzas para ocultar
la verdad que allí en mi mente
yo he pretendido guardar.
Que cuando tus labios siento
por mi espalda juguetear
y tu cuerpo que presiento
esta a punto de alcanzar
ese sublime momento
en que amar es solo dar
y en cada orgasmo un intento
del extasis alcanzar,
es cuando débil presiento
que volverás a jugar
con aquel mi sentimiento
que una vez te supe dar.
Contigo he vuelto a soñar
pero esta vez no te miento
no he logrado trasladar
la fuerza del sentimiento
y el amar solo por dar,
al instante o al momento
en que tu ibas a gozar
con el apasionamiento
que solías demostrar,
y tal como te lo cuento
en sueños llego a pasar,
fue nuestro amor un momento
de dicha plena al amar
y que hoy como un lamento
ni en sueños logro encontrar
tus caderas, que tormento
cegador al verte andar
o tus senos, alimento
de mis labios sin cesar
o tu piel, el complemento
que solía reflejar
cual si fuera linimento
tu sudor al resbalar
tras el goce del momento
ya sin fuerzas para hablar.
He despertado y el cuento

se acabo sin comenzar.

jueves, 27 de diciembre de 2007

En noches de luna llena

En noches de luna llena
siempre vuelvo a recordar
aquella tu piel morena
que solía acariciar,
retozando allí en la arena
donde las olas del mar
borraban todas mis penas
hasta el éxtasis lograr,
cuando tus labios que apenas
mi cuerpo osaban rozar
mi piel ardiente besaban
y entre el murmullo del mar
mil suspiros escapaban
que aun acierto a recordar.
Y tal vez esta condena
que me quieres aplicar,
de olvidar la luna llena
nuestros cuerpos junto al mar,
mis dedos en tu melena
y entre rizos deslizar
hasta tu nuca morena
que siempre olía a azahar,
mil besos que en luna llena
te hicieron siempre gozar
tal vez, en esa condena
este el nuevo despertar
que acalle todas las penas
sacie esa mi sed de amar
y me calme en noches plenas
en que vuelvo a recordar
tu pasión, tus dulces besos,
tus caricias junto al mar
y me permita, muy lejos
otras noches alcanzar
en que tus labios, mis besos
se van de nuevo a encontrar
que mis recuerdos son esos
y los tuyos al soñar
son vida de luna llena
tantas noches junto al mar.



viernes, 21 de diciembre de 2007

Quizas es el recuerdo...

Quizás es el recuerdo quien me miente
o tal vez es la sombra del pasado
que entremezcla jugando con mi mente
la realidad y el sueño deseado.
No acierto a discernir tan fácilmente
que fue ilusión o que fue lo soñado
ni logro razonar y comprenderte
ni encajo mi presencia en tu pasado.
¿Fui tu amante acaso en la ocasión?
o tan solo un amigo diferente
que te supo entregar con ilusión
lo que tanto anhelabas en tu mente.
Ya no quiero encontrar ni la razón
ni el misterio que envuelve tu presente
que genera en mi tal desazón
que te miro y te veo diferente.
Poco puedo aportar a la pasión
que compartimos ilusionadamente
ni podría mejorar en la ocasión
las caricias que encontraste diferentes.
Ni mis labios en tus labios volverían
con la huella de mis besos a encender
la pasión que tus besos prometían
cuando ardiente deseabas poseer,
esas manos que tus muslos recorrían
esos labios que besaban tu entrepierna
y a los labios de tu sexo sonreían
cuando alcanzabas tu máximo placer.
El tiempo ha ido pasando, ciertamente
mas no puedo ocultarte ¡que osadía!
que cuando a tu lado me encuentro casualmente
se estremecen mis sueños y daría
la vida por amarte eternamente.

martes, 18 de diciembre de 2007

Quizás cometí el error

Quizás cometí el error, de intentar rememorar
del ayer, esos tus besos, tu forma de acariciar
recovecos de mi cuerpo o tu boca que al besar
encendía mil pasiones imposibles de olvidar.
Aquellas tus ilusiones, que me solías contar
con tu cabeza en mi hombro y acurrucada soñar
que nuestros cuerpos se unían para sin temor donar
del uno al otro el amor, que quisimos disfrutar
en tardes de cita incierta, difíciles de alcanzar
que hoy parece hasta imposible que llegaran a pasar
y que fueron nuestros besos, nuestros cuerpos al amar
testigos de un ayer cierto, que no quisimos borrar.
Y tal vez allí en tus ojos me ha parecido encontrar
una promesa sentida, unas ansias por amar
el deseo de tenerme a tu lado y conjugar
del amor el sutil verbo, del que amar es siempre dar.
Mas sin duda confundido, no he sabido interpretar
tus miradas, tus silencios, ni tu forma de expresar
que no ofrecías promesas, ni esperas volver a dar
a tu cuerpo sensaciones difíciles de olvidar,
y con estas sensaciones me acabo de reencontrar
con la realidad presente y no te voy a ocultar
que al despertar de tu sueño, de mi podrás recordar
aquel caballero andante, que tanto te supo amar
y que hoy de tu lado alejas, para en silencio llorar.
Quizás cometí el error, de intentar rememorar
con el recuerdo presente de esa tu forma de amar
tus caricias y tus besos, y tu forma de mirar,
de creer ingenuamente que esperabas alcanzar
a mi lado las caricias que tanto te hacen gozar,
sin detenerme un instante y reflexivo pensar
que si de verdad quisieras en mis brazos retozar
y enfrentados cuerpo a cuerpo, mil goces rememorar
cuando una mujer lo quiere, poco el hombre ha de dudar
y si tu no lo has querido, de nada vale luchar
que el tiempo siga su curso, que yo volveré a soñar.

domingo, 16 de diciembre de 2007

Renacieron en mi...

Renacieron en mi mil sensaciones,
o fueron los recuerdos nuevamente
saliendo del archivo de la mente
abriendo un mundo nuevo de ilusiones.
Nacida facilmente en el reencuentro
aquella revivida sensación
sintiendo las caricias, la pasión
encendida la llama ya muy dentro,
renacieron instantes y momentos
recuperando de nuevo tu mirada
apenas un instante apasionada
nutriendo con tu amor mis pensamientos
ofreciéndome tu amor enamorada
mirandome a los ojos y tu aliento
ofrecía en tus labios su posada
navegando por entre los silencios
tanto tiempo guardados en la nada
su pasión, su amor, enamorada
en una entrega repleta de emoción
renovando de nuevo la ilusión
rezando por sentirte deseada
amada y que de nuevo acariciada

tus sueños y mis sueños, son pasión.

viernes, 14 de diciembre de 2007

Los dias van pasando lentamente

Los días van pasando lentamente
y cada noche sueño inútilmente,
que al despertar y abrir pausadamente
el buzón del correo, un remitente
alegrara esta mi desventura,
de no saber si una nueva andadura
a tu lado es posible en mi locura
por tu amor en su esencia, la mas pura,
y al entrar los mensajes lentamente
uno a uno repaso disciplente
si es el tuyo el que siendo diferente
es aquel que seduce nuevamente
pensamientos, recuerdos, la lectura
de un ayer pintado de aventura
donde no hubo lugar a la amargura
y que unió mi pasión, tu galanura
con acentos de fuerza impenitente
que al juntar nuestros cuerpos suavemente
en cascadas de amor, tendieron puente
pasarela de amor contra corriente,
que no quiso quedarse en aventura
y en las mentes de nuestra edad madura
grabadas nos dejo, y así perdura
el ayer, hoy presente en mi locura,
porque podré vagar eternamente
y tu a mi lado pasar indiferente
y esperar yo tu mensaje inútilmente
y no encontrarnos en medio de la gente.
Los días van pasando lentamente
y cada noche en mi sueño estas presente,
mas te digo en verdad, sinceramente
que aunque de tu llamada este pendiente,
renunciare a ti y con cordura
me alejare cual vine, sin locura
continuando cansado la andadura
cual soñador de la triste figura
ayer quijote, amante complaciente
hoy fiel esclavo de un sueño diferente
que quiso ofrecerte gentilmente
caricias, besos y amarte ciegamente
sin recordar, cegado en su locura
que el cauce busca el rio en su aventura,
las golondrinas el nido en su andadura
pero tu corazon, tal vez por desventura
perdido el sentimiento y la frescura
que antaño le hizo ser contracorriente
refugio de un amor pleno y candente,
se esconda hoy ya cansado, indiferente,
entre los pliegues de tu mente pura

del ayer mi amor y tu locura.

lunes, 10 de diciembre de 2007

Yo se que fui....

Yo se que fui una vez el complaciente
esclavo de tus juegos y aventuras
de caricias, de besos, mil locuras
que sin jurar amarnos, solamente
entregados a vivir, mentes maduras
el fruto de un amor sin ataduras
que vivían su amor de forma ardiente.
Tu sabes que mis besos encendieron
la hoguera que ocultabas, como a obscuras
temiendo que al volar sin ataduras
los sueños que en tu mente se escondieron
pudieran recrear mil aventuras
o esas películas cuyo guión tu creas
y en las que eres el centro de tus dudas
que nunca encuentran respuestas oportunas.
Y todo o nada esta en mi mente
hoy enferma , de forma no esperada
que no me hace olvidar del ayer nada,
y me hace revivir mas fuertemente
cada uno de tus besos, tu mirada,
tus senos, y tu piel acariciada,
por mis labios apasionadamente.
Tal vez sea el destino sutilmente
el que juega conmigo una partida
que de antemano ya tengo por perdida
y que sin trampas, tal vez mas fácilmente
me dejaría la mente adormecida
para soñar la tierra prometida
de ese tu amor, que en mi fue diferente.
No se si volvere a besar tus labios,
no se si mis caricias en tu cuerpo,
no se si de mis manos en tu piel
podré tener constancia nuevamente
mas no importa el sueño del ausente
si quedaron en nada los agravios,
corazones helados como un muerto

y borrados los recuerdos en tu piel.

sábado, 8 de diciembre de 2007

Recuerdo cada momento

Recuerdo cada momento de aquel día especial,
que nos unió, sin pensarlo, ni tan siquiera quedar,
sin una cita, un mensaje, sin tiempo para pensar,
¿dónde vamos me dijiste? de una forma natural.
No serviría de mucho ahora el lugar recordar
y no tienen relevancia, los cuadros, aquel mural,
jarrones de porcelana, figuritas de cristal,
una cajita de música y tiestecitos de azahar.
Una música sonaba a lo lejos y el cristal
que los balcones cerraba no permitió confirmar
si era Sabina o Serrat con su camino al andar
nos miramos fijamente y la música dio igual.
Me abrazaste de repente y tus labios al besar
mis labios, tan suavemente con su sabor especial
despertaron los sentidos de una forma natural
una caricia, un suspiro, una mirada y amar.
Acurrucada en mis brazos, sin ya tu peso notar
te alcé del suelo amoroso y te llevé servicial
hasta un lecho que no era, de la casa el principal
allí te deje ágilmente, como puedo recordar,
y tus besos devolvía, uno por mil sin final
y tus manos, tus caricias eran ya el mejor aval
de que aquel amor presente, no se podría olvidar.
Mis manos que recorrieron todo tu cuerpo al pasar
por tus caderas, tus senos, tu nuca y hasta el final
de tu columna llegaron, y ya sin tener rival
jugueteando con los rizos, te hizo de gozo estallar.
Tu cuerpo se estremecía y música celestial
resonaba en tus oídos, amor tu querías dar,
y la pasión que sentías por fin echaba a volar
un suspiro, mil gemidos, otro beso inusual.
Me recostaba a tu lado, cuando me hiciste notar
que nunca antes viviste, experiencia similar
con tu sexo humedecido, por la forma de gozar
y tus manos suavemente, en mi cuerpo sin parar
buscaron con sus caricias, hacerme en ti reposar.
Así recuerdo yo ahora, aquel día especial
en que sin cita, ni acuerdo, decidimos navegar
por los mares misteriosos del destino, que al amar
entre tormenta y mar calma, remolinos de coral,
espuma que las sirenas entre olas al nadar
transforman pacientemente, las rocas al horadar
como tu cuerpo y mi cuerpo con movimiento sensual
sellan cada nuevo encuentro con un sabor especial
que por mas que el tiempo pase, nunca lograra borrar.
Recuerdo cada momento de aquel día especial,
que nos unió, sin pensarlo, ni tan siquiera quedar,
sin una cita, un mensaje, sin tiempo para pensar,
por eso aun hoy yo te digo, que tu amor no tuvo igual.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Dormías y en tu rostro una sonrisa

Dormías y en tu rostro una sonrisa
me hizo suponer, que si soñabas
aquel era el momento en que tu amabas
y gozabas del placer de amar sin prisa.
Tu cuerpo adormilado, mas no ausente
un brazo que la almohada sujetaba,
tus senos que en tu sueño dibujaba
una mano que suave y lentamente
recorría tu piel y sabiamente
de los pies a la nuca acariciaba,
y en tu monte de venus, suavemente
con mis labios en tu piel que húmeda estaba
ofreciendo los goces que guardaba
entre recuerdos perdidos en tu mente
de los días de amor, rosas, simiente
que el tiempo aunque intentaba,
de tu memoria borrar nunca lograba
mi imagen, mis besos y aunque ausente
tu sabes, aun dormida que al que amabas,
oculto en los silencios que adorabas
acudirá hasta ti y nuevamente
los goces, las caricias que anhelabas
los besos, las pasiones, que grababas
en tu mente de mujer enamorada
ardiente en su deseo, apasionada
y aquel de cuyo amor nada esperabas,
te sorprendió de forma diferente
haciéndote feliz, ardientemente
en encuentros y citas que guardadas
en tu mente quedaron para siempre
y que nunca podrán ser olvidadas

aunque el tiempo, al pasar, nos desoriente.

miércoles, 5 de diciembre de 2007

"Banys San Gerard"

“Banys San Gerard” se llamaban, ya no los vas a encontrar
situados a pie de playa, en Mongat villa sin par
de pescadores que el tiempo, acabo por desplazar
a otros puertos y dejaron mil recuerdos en la mar.
Cuando todos circulaban en trenes para alcanzar
de la costa los lugares donde poder veranear
allí junto al primer túnel que RENFE puso al pasar,
bajo el monte que es un gato si lejos lo has de mirar
allí el “Sant Gerard” guardaba mil historias por contar.
Amores que allí nacieron, junto a la brisa del mar
caricias que se fundieron en un eterno soñar
besos, abrazos, suspiros, pasiones que al retozar
a nueva generaciones dieron vida sin cesar.
Amores que se perdieron, y se debieron borrar
tras un atardecer frío, escalofrío al pasar
a tu lado y no mirarle y hasta la orilla bajar
caminado en los rompientes de las olas sin cesar .
Tantas historias nacieron, tantas podría contar
con dramas, con alegrías, con ilusiones sin par
fiestas, baile, algarabía y el volei para jugar,
bikinis, música, ritmo, verbenas que al recordar
inundan los pensamientos de un bendito bienestar.
“Banys San Gerard” se lllamaban , ya no los vas a encontrar
la llamada “Ley de Costas” acabó por derribar
aquel templo de la vida, que veías al pasar
cuando a “El Maresme” acudías para poderte bañar
y así los recuerdos vivos de mi vida junto al mar
quedaron por siempre unidos a la arena y al palmar
que en su lugar han montado para que puedan mirar
el bronceado en las chicas, sus senos sin ocultar
y esas piernas longilíneas que alli a la orilla del mar
se entremezclan con las algas, para su piel mejorar.
Allí entre mil sueños duermen, tantas cosas que contar
que por mas que lo he intentado, no he logrado ni hilvanar
el principio de una historia que se pudiera explicar
y es que en todas aparece sin que lo pueda evitar
el recuerdo de esas veces, pocas, no vaya a engañar
en que fuimos tan felices que no se puede evitar
al recordar los momentos, revivirlos y callar.
“Banys San Gerard” se llamaban, ya no los vas a encontrar
situados a pie de playa, en Mongat villa sin par
de pescadores que el tiempo, acabo por desplazar
a otros puertos y dejaron mil recuerdos en la mar,
y tal vez tu que me lees, acabas de recordar
momentos allí vividos, noches de amor que al pasar
el tiempo nunca ha borrado, ni tu quieres olvidar
que cuando dos fueron uno, amar es tan solo dar
lo mejor de cada uno, al otro y nada esperar,
“Banys San Gerard” se llamaban, ya no los vas a encontrar
pero que lo allí vivimos, nadie nos lo va a quitar.


lunes, 3 de diciembre de 2007

Caida de estrellas

Cuantas noches de verano, en silencio, sin hablar,
el uno muy junto al otro y al fondo el rumor del mar
contemplamos las estrellas que caían sin cesar
dejando a su paso el brillo de su fugaz transitar.
Ese espectáculo vivo que no se puede olvidar,
presagio de guerras dicen, pescadores del lugar,
y las estrellas a miles, imposibles de alcanzar
siempre desapareciendo sin ningún rastro dejar.
Y nosotros nos miramos, no hizo falta declarar
sentimientos, pensamientos y ni tan siquiera hablar
tu boca busco la mía, y mis labios al besar
hallaron fuente de vida, que solo tu sabes dar.
Mi boca alcanzo tus senos, tus manos aquel lugar
en que florece la vida, que no te costo encontrar,
una mano en tu entrepierna, y la otra mano al azar
recorría tu piel fina, haciéndote retozar.
Las pieles se enardecían, parecían estallar
las piernas entrelazadas y los cuerpos al rozar
aceleraban los pulsos y se afanaban en dar
salida al amor que oculto de día debía estar.
Y tal como yo lo cuento, es como pudo pasar
aunque nadie sabrá nunca si lo que hago es recordar,
o que tan solo lo invento, para volverte a entregar
lo mejor que en mi encontraste, esa mi forma de amar.
Cuando en noches de verano, en silencio, sin hablar
miro al Cielo y a mi lado, tu ya no sueles estar
recuerdo aquellas estrellas que corrían sin cesar
dejando a su paso estelas, imposibles de alcanzar.

domingo, 2 de diciembre de 2007

El rio vuelve a su cauce

Una nota que me envías
me ha llamado la atención
y en un poema decías
lo que sigue a continuación,

“El río vuelve a su cauce,
la golondrina, a su nido,
sólo el corazón no vuelve a tener
la ilusión que ha perdido”.

Las ilusiones perdidas
no hacen daño al corazón
que en el cerebro escondidas
conviven con la razón.

Las golondrinas que al nido
vuelven al atardecer
durante el día han vivido
la libertad y el placer,
el mar, los peces y unido
un hermoso atardecer.

Del cauce al que el río vuelve
puedes tu reconocer
que entre marismas se envuelve
para en el mar renacer.

Ríos, cauces, golondrinas
el mar, el nido....tal vez
son las claves que adivinas
mejor sabré comprender.

Y te diré sin engaños
que tras volverte a leer,
por mas que pasen los años
y aunque no pueda volver
a recrear en tus sueños
las ilusiones de ayer,
de mi corazón son dueños
tu recuerdo y tu querer.

Si el río vuelve a su cauce,
la golondrina, a su nido,
¿sólo el corazón no vuelve a tener

la ilusión que se ha perdido?.