Siento en mi cuerpo
el frio de la muerte
y aquella angustia
que noté al perderte.
Siento sangrar
mi corazón ardiente
veo tu imagen
bella y sonriente.
Siento en mi alma
punzadas de dolor
cuando recuerdo
mi sincero amor.
Guardo el recuerdo
de aquellos rojos labios
con que me hiciste olvidar
tantos agravios
y pido al Cielo
que te dé el perdon
aunque jamás
pueda volver a verte
porque llenaste mi vida de dolor
y destrozaste mi alma de tal suerte
que no concibo mi vida sin tu amor
y prefiero morir con mi dolor
que tenerte a mi lado, sin quererme.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario